Mujeres con adicción, las que menor acceso tienen a un tratamiento en Tijuana: Unidos con Esperanza
El consumo de nuevos opioides como el fentanilo han incrementado la problemática de las adicciones en Tijuana, aseguró Angélica Medina Jiménez, directora de la organización Unidos con Esperanza, sin embargo, resaltó que lo agravante de esta situación es que solo una persona de cada 11 en la ciudad recibe tratamiento.
Ante esta situación, y en el marco del 13 aniversario de esta organización, la activista hizo un llamado a la sociedad y el gobierno para hacer un frente común para atender de manera integral a esta población y “hacer de una mejor Tijuana en donde los jóvenes tengan derecho y acceso a un tratamiento”.
Durante su exposición, Medina Jiménez expuso también la disparidad que existe entre hombres y mujeres en cuanto al acceso a un tratamiento, puesto que, dijo, en el caso de los hombres, uno de cada seis puede acceder a ello, mientras que las mujeres solo una de cada 16 recibe un tratamiento.
Ante esta situación, la directora de Unidos con Esperanza pidió “no criminalizar ni denigrar a los consumidores”, puesto que “muchos de ellos lo que tienen son trastornos mentales que buscan paliar con el consumo de sustancias” y lo que necesitan, reiteró, “es atención psicológica y un tratamiento que les ayude a salir de esa situación”.
Recordó que cuando inició su organización, comenzaron en la colonia Del Río atendiendo a cuatro personas y, en la actualidad, atienden diariamente a un promedio de 100, lo cual deja ver -como lo muestran las estadísticas- que “Tijuana sigue siendo una de las ciudades con mayor prevalencia en el consumo de sustancias, principalmente entre los jóvenes”.
“Por ello es necesaria esa unión de fuerzas, porque se requieren de trabajos de reinserción social y de trabajo de prevención; hay que coadyuvar, trabajar entre gobierno, empresarios y sociedad civil para generar espacios y brindar un tratamiento médico, psicológico y psiquiátrico para las personas con un problema de adicción”, destacó.
También resaltó que, de acuerdo con el último estudio de adicciones en Baja California, unas 200 mil personas han tenido alguna situación de salud de este tipo, ya sea por consumo de una ocasión o periódica, de las cuales unos 20 mil son menores de edad, y refirió que, en 13 años, ellos han atendido a más de mil 800 personas que han tenido este problema de salud.
“Nosotros les damos atención integral, estamos en contra de la criminalización de estas personas, porque lo que tienen es una enfermedad y de lo que se trata es de un problema de salud”, puntualizó.