Activistas en la ciudad fronteriza de Tijuana criticaron la postura de abandono que ha tenido el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, hacia los migrantes mexicanos que son deportados de Estados Unidos, acusando la falta de apoyos, de recursos y de oportunidades para su reinserción a la sociedad.
Las organizaciones civiles Ángeles Sin Fronteras, SOS Migrantes y Alianza Migrante presentaron un informe sobre la situación que viven los deportados mexicanos, quienes, señalaron, han quedado invisibilizados ante la crisis migratoria que se vive en la frontera, por lo que exigieron al gobierno mexicano la atención inmediata de esta población.
Abandonados a su suerte
Durante la presentación del informe, José María García Lara, presidente de la Alianza Migrante en Tijuana, condenó que diariamente y por las noches “los mexicanos son arrojados de los Estados Unidos hacia México y pareciera que eso no se da”.
Por lo que pidió que “ojalá que (las autoridades) entiendan que, si bien hay que ayudar a otras comunidades, también hay que ayudar a nuestros mexicanos porque no puede ser que ellos queden abandonados a su suerte en la frontera”.
El activista resaltó que, en Tijuana, las organizaciones convocantes han venido levantando la voz sobre esta situación bajo la exigencia, principalmente, de que “los migrantes deportados nacionales deben ser atendidos, que debe haber programas integrales y más acción de ayuda para nuestra comunidad”.
“Entendemos lo que está ocurriendo con los migrantes que están siendo desplazados también mexicanos que deben ser apoyados o de otras nacionalidades, pero, los que estamos aquí en la frontera hemos impulsado acciones para poder atender a los migrantes deportados”, dijo.
Baja ese sentido García Lara agregó que “hace falta más, sobre todo esa atención desde que salen de los Estados Unidos a México, para que en este país los reciba el gobierno”, para lo cual precisó que es necesario inyectarle más recursos para su atención o atender las peticiones que ellos han planteado como el establecer una tarjeta de Bienestar Migrante.
“Si (el gobierno) no da recursos económicos a la sociedad civil, si no quiere dar la tarjeta de Bienestar Migrante pues que le inyecte más recursos al Gobierno Federal para que puedan ser mejor atendidos cuando llegan a las fronteras”, precisó.
Andrés Manuel desatendió también a ONG’s
Sergio Tamai, presidente de Ángeles Sin Fronteras, acusó en entrevista que, “cuando el presidente Andrés Manuel llegó al gobierno, el entonces sub secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, en el presupuesto del 2020, suspendió el Fondo Migrante y lo quemamos aquí (una piñata con su imagen), luego nos encontramos al presidente, le dijimos de esta situación y luego increíblemente no volvió ese fondo migrante”.
El activista acusó al presidente por desproteger a las organizaciones civiles con esa acción y, ante esa situación, “le propusimos la tarjeta del Bienestar Migrante, para que les dieran para sus gastos y pues ni tarjeta y ni fondos”.
“La gota que derramó el vaso es que ahora resulta que le están dando dinero a todos los centroamericanos que están deportando a sus países y ahora en junio o julio van a estar dándoles a los venezolanos 100 dólares por mes durante ocho meses y luego a los colombianos”, manifestó.
“Y entonces, ¿Cómo es posible que no estés apoyando a los mexicanos deportados que son los que nos están mandando más de 63 mil millones de dólares en remesas; por eso, antes de apoyar a los extranjeros, apoya a los desplazados, a la crisis que está aquí en los albergues y a los que están con esta carga tan pesada, es heroico lo que están haciendo”, apuntó.
Mandan remesas y después terminan en la calle
A esto se sumó José Luis Pérez Canchola, integrante de la Academia Mexicana de Derechos Humanos, quien en entrevista con Nómadas dijo que este tema “es un asunto de justicia social para con los deportados, y de equidad”
“Porque si reconocemos a los migrantes cuando están en Estados Unidos como una fuente importante de recursos, hablando de cuestiones de remesas de 60 mil millones de dólares que mandan por año, la pregunta es ¿por qué no hay recursos para ayudarlos y apoyarlos cuando son deportados?”, recalcó.
El defensor de derechos humanos destacó que, si se está hablando de justicia social y económica, “yo creo que sería muy sencillo hacerlo, pero tenemos funcionarios intermedios y menores sin sensibilidad para eso, el discurso del presidente desde un principio ha sido de respeto a los derechos de los migrantes, pero no hay acción en la parte de los funcionarios”.
Para darle solución a ello, Canchola también consideró que se tienen que reformar leyes como la Ley de Refugio, la Ley de Migración y la Ley de Asilo, “que son leyes muy retrasadas, ya no corresponden a la realidad que estamos viviendo ahora, y en esas leyes debería establecerse los recursos públicos para atender a la migración”
“Ya lo hemos dicho, de todos esos millones de dólares que entran a México, Tijuana es el primer municipio con mayor recepción de remesas en todo el país y, en ese sentido, una buena parte debería terminar en beneficio de los migrantes”, puntualizó.
