Activistas y migrantes en la ciudad mexicana de Tijuana, fronteriza con Estados Unidos, salieron este martes en protesta para exigir que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) pueda ingresar a los centros de detención migratoria del Instituto Nacional de Migración (INM), para garantizar los derechos de las personas en tránsito.
La comitiva se dirigió a las instalaciones de esta comisión portando pancartas que rezaban frases como: “Vulneración de los derechos civiles y políticos” y “Vulneración de la seguridad”, acusando que en estos lugares generalmente les vulneran sus derechos como a tener una llamada por teléfono con familiares o algún licenciado.
El pastor Albert Rivera Colón, director de Ágape Misión Mundial, dijo a medios que la petición es que la comisión pueda ingresar y recabe testimonios entre los propios migrantes, y “de esa manera sus derechos jurídicos no sean violentados y que tengan el acceso a una representación legal, lo cual actualmente el INM les está negando a los migrantes”.
Destacó que esta manifestación derivó del caso de cuatro personas de origen colombiano, entre ellas dos menores de edad y una mujer que está embarazada, a quienes detuvieron autoridades del INM en Tijuana, a quienes les quitaron sus documentos y, además, las enviaron a Tabasco sin objetivo alguno.
“Les quitaron sus cédulas, y con ellos les están quitando sus derechos políticos, de tránsito y su libertad, son grandes violaciones que está haciendo el Instituto Nacional de Migración y por eso le estamos solicitando a derechos humanos que vayan a estas instalaciones y hablen con los migrantes para certificar que se garanticen sus derechos”, expresó.
El activista agregó que también quieren que revisen si estas instalaciones para garantizar que sean adecuadas, ya que los migrantes pasan días ahí detenidos y requieren de baños para su aseo personal, además de médicos de todo tipo, considerando que entre ellos siempre hay mujeres embarazadas.
Precisó que, además, este grupo de personas venían en calidad de turistas a la ciudad, sin embargo, el INM después de haberlos retenido y quitado sus papeles, los trasladó a Tabasco, donde solamente se les concedió un documento de estancia temporal, cuando ellos venían por turismo, lo cual consideró como “algo muy terrible”.
“Ante ello pedimos también el apoyo de los empresarios, a los turistas no les pueden estar haciendo esto, porque solamente quieren visitar, pero el INM se la saca con que no les cree y les quita su permiso de turista, los encarcela sin derecho a representación legar y los deja sin derechos como turistas”, apuntó.
Rivera Colon precisó que actualmente estamos bajo una situación en la que “no queremos que nuestros paisanos en Estados Unidos se les deporte, de una manera que no puedan llamar a un abogado o representante legal, es lo que la presidenta está exigiendo, que Estados Unidos no haga, pero también nosotros no lo debemos de hacer”, manifestó.
“Hay una enorme violación a los derechos humanos por parte del Instituto Nacional de Migración (INM) y le pedimos a la presidenta Claudia Sheinbaum que destituye y saque a estos funcionarios que violentan derechos y que lo haga como un ejemplo hacia Trump y EEUU de que nosotros no hacemos es”, puntualizó el pastor.
“No nos dejaron hacer nada”
Una de las mujeres migrantes que sufrió de esta violación a sus derechos, y se mantuvo como anónima, compartió a través de un video que ellos entraron de forma “legal al país, como turistas, pero nos quitaron los celulares y nuestras cédulas de soberanía, nos quitaron todo y no nos dejaron hacer nada, no pueden hacer eso, son nuestras pertenencias”.
Agregó que “de nuestros celulares borraron todo, fotos, videos, contactos y demás, además que no nos dejaron llamar ni utilizar el teléfono… nosotros estamos en Villahermosa, Tabasco, acá nos trajeron y nos dijeron que aquí nos iban a dar un permiso pero de migración, pero lo que nosotros queremos es que nos regresen nuestras cédulas de ciudadanía, no podemos estar indocumentados en este país”, apuntó.
