Los altos niveles de contaminación en las playas de Baja California generan una preocupación e impulsa a buscar las medidas adecuadas para que esto no sea una constante, sobre todo por la temporada vacacional que se avecina en la región, señaló Marisol Montaño, presidenta de la asociación Hagamos Conciencia.
Destacó que en las últimas horas la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) emitió un comunicado informando a la población sobre ocho playas del estado que no son aptas para su uso recreativo, estando a pocos días de la temporada vacacional por Semana Santa, en la que decenas de familias locales y foráneas buscan un contacto con el mar para diversas actividades.
Las playas no aptas de acuerdo con la Cofepris son en Tijuana: San Antonio del Mar, Baja Malibú, Playa Blanca, Parque México, La Mojonera o El Faro y Cañada Azteca; en Playas de Rosarito: Rosarito 1 y Rosarito 3.
“La mayoría de los estados de la República que cuentan con playa están evaluadas como aptas para su uso, pero Baja California tiene ocho playas calificadas como no aptas, lo que significa que la entidad tiene las playas más contaminadas de México, por ello es momento de cuestionarnos qué estamos haciendo para revertir esta situación, porque no solo es el anuncio de que no son aptas, sino el interés que debe de existir por los altos niveles de contaminación”, expresó.
La presidenta de Hagamos Conciencia explicó que la media de enterococos en una playa es de 200 NMP (Número Más Probable) por cada 100 mililitros de agua, pero tan solo en San Antonio del Mar (Tijuana 1) el estudio arrojó que se detectaron con 3, 076 NMP, sin embargo, genera mayor alarma que en Playa Blanca, también en Tijuana, Cofepris anuncia que se han detectado 15, 531 NMP, siendo este el número más alto.
“Es urgente que atendamos el tema de contaminación de playas y mares en México, sobre todo en Baja California, las sanciones a la industria maquiladora, hotelera, restaurantera y todos los involucrados en el arrojo de aguas grises y negras a nuestras playas, deben de ser más severas, no se puede permitir que la nula conciencia de algunos impacte en otros”, señaló.
Marisol Montaño resaltó que esto viene a afectar directamente en la economía de quienes generan ingresos gracias a la afluencia turística, pues al emitirse alertas como estas genera un poco interés y desconfianza por visitar las playas de Baja California, que se vuelve el segundo Estado con agua contaminada después de Guerrero en donde solamente dos de sus playas se detectaron con contaminación.
