Fuerza, aguante, tenacidad, inspiración, son algunas de las muchas palabras con las cuales podemos definir la historia y la persona de Ruby Gardenia, luchadora profesional tijuanense quien durante toda su vida ha librado batallas arriba y abajo del ring, siempre convencida de encontrar el respeto que se merecen las diversidades.
El pasado miércoles 21 de junio, Ruby fue la invitada especial para abrir e inaugurar las actividades del 2do Festival Multidiversidad Cultural, que organizan las organizaciones Comunidad Cultural de Tijuana LGBTI AC (COCUT), Multiforo Revolución y Calafia Cultural, un evento para visibilizar a los artistas de la comunidad LGBTI+.
Acompañada por Samantha Luna, promotora cultural y especialista en lucha libre, ambas entablaron un diálogo en el que la luchadora tijuanense que encarna al grupo de los llamados “exóticos”, rememoró su paso difícil por la vida antes de encontrarse con la lucha libre, en donde la vida nocturna le jugó malas pasadas que ya se venían contrariando con su familia.
Antes de ser luchadora profesional, Ruby fue travesti, época en la que sufrió la mayor discriminación y rechazo por parte de la ciudadanía, pero un día se canso “de ser un producto para los hombres”, se encontró con la lucha libre, no lo pensó más y se inscribió a las clases en el Auditorio Municipal ‘Fausto Gutiérrez Moreno’.
Su maestro fue ni más ni menos que el señor Miguel López, mejor conocido como Rey Misterio Sr, el creador de todo un legado personal en la lucha libre mexicana y forjador de otros grandes luchadores que se han convertido en ídolos del pancracio, el ejemplo más conocido es el de su sobrino, Rey Mysterio.
Desde entonces, Ruby ha forjado una trayectoria indiscutible durante 24 años hasta la fecha, pero no todo fue miel sobre hojuelas, primero le tocó lidiar con el mundo y el entorno machista que caracterizaba a los luchadores, lo que le llevó de regreso al clóset, y en donde la rudeza era primordial para demostrar quién eras.
Así pasó un año y medio, periodo que le llevó para finalmente hacerse profesional, siempre bajo el amparo del señor Rey Misterio y con el objetivo primordial de luchar por aquellos que en la diversidad son invisibilizados, bandera que hasta hoy en día sigue enarbolando.
Ruby compartió que después vino algo de lo más desagradable, algo de lo que le cuesta hablar, pero que la hizo más fuerte para afrontar las batallas y eso fue el no contar con el apoyo de su familia durante todos estos años que lleva como profesional, lo cual le duele, le cala, pero que se reconforta con el amor que le brindan los aficionados en cada auditorio que se presenta.
“Estoy a punto de retirarme de la lucha libre, mi familia no fue a mi primera lucha y seguramente no irán a la última, y eso me pone triste. Mi familia nunca ha sido copartícipe en mi trayectoria, ha sido difícil no contar con su apoyo, pero mi familia todo este tiempo ha sido el Auditorio, las cinco mil personas que van a ver la lucha y me apoyan, ellos son mi familia”, resaltó.
Ruby Gardenia es pues toda una guerrera, ejemplo e inspiración para todos, fiel representante de la Tijuana que es punta de lanza en el país y, además, comprometida siempre con su sociedad, con los que más necesitados, pues fuera del ring como persona es docente y además se dedica a ayudar a los albergues de los abuelos.
“Mi mayor énfasis es buscar el respecto, yo lo he dado, por eso también me lo he ganado; cada quien tiene una percepción de las personas, de lo que eres, lo que muestras y lo que proyectas, y a mí el personaje de Ruby Gardenia me da la fuerza y la determinación; Ruby es despampanante, pero también comprometida con visibilizar la diversidad y luchar por sus derechos”, puntualizó.
